domingo, 24 de enero de 2010

Cristo no se marchó de Haití (Dr. Miguel García Tatis)

El Dr. Miguel García Tatis es un Laico Misionero de los Sagrados Corazones, nacido y residente en Montecristy, a dos pasos de la frontera haitiana por Dajabón. Junto con el P. Francisco Gayá, msscc, y Josep Riera (otro LM mallorquín) fueron el alma del Centro de Rehabilitación que se levantó en la ciudad del Morro con ayuda del Govern de les Illes Balears.
Ahora me ha enviado un paquete de instantáneras de las víctimas del terremoto haitiano, a donde corrió a prestar su servicio médico. Pongo dos como ejemplo y las breves notas enviadas en los e-mails. Acaba con un poema de un dominicano, Miguel García Romero, que no sé si es pariente suyo...

Cristo se quedó acompañando
Esto fue así, el P Ramiro en donde nos quedamos en Puerto Principe, me hizo su interpretacion y dijo: ¨Cristo no quiso ser extraño a lo que sucedió, no se rompió, no se marchó, se quedó acompañando a los aplastados y sufrientes”.

Un paquete de fotos en el Hospital de Jimaní, pequeño con 50 camas y esa noche tenía 315 pacientes heridos. Nos pusimos a hacer cuanto pudimos. Así luce Puerto Príncipe por doquiera anduve. La Catedral derribada, el Palacio Nacional... Las fotos de las guaguas: una típica haitiana y la otra llegando a Montecristi y me gustó la solidaridad expresada en ese logo-afiche.
El muy gentil P. Ramiro dispuso de dos habitaciones para que durmiésemos, yo preferí seguir en mi jeep, comprenderán porqué...

Otro paquete es del hospital de San Damián: Aquí laboramos con las Hermanas de la Madre Teresa de Calcuta, equipo de ortopedas dominicanos. Es un hospital pediátrico y en este caso “de todo”, hermoso, muy nuevo, agrietado, grandísimo. Actualmente con unos 700 pacientes del terremoto. Sólo fémures rotos teníamos antes de ayer 17, sin contar piernas, brazos, costillas, en cara, etc.
El pasado miércoles acabo de venir de Puerto Principe. He dicho que aquello es inenarrable. No solo el terremoto, ahora estan más de dos millones de personas sin casa y en los parques, solares baldios, espacios abiertos. Peor aún, los heridos que se estan gangrenando. Habrá que realizar miles de mutilaciones y otros continuarán muriendo al hacer Gangrena gaseosa. Dolor, espanto, miseria, hambre. Pronto lo olvidaremos, ellos no, seguirán hacia la Cruz! ¿Qué haremos para aliviar esta situación?

Mi abrazo a ti y con este mi corazon, Miki

HAITI
Haití, metal entristecido
bejuco de congoja pendiendo del crepúsculo
la tierra está ofendida
tú no tienes la culpa
descalzo creciste en el Caribe, jugando a La Escondida
sin que nadie cuidara tus pisadas
enero nos mintió, prometió portarse bien
pero fuimos vilmente delatados con la isla
Yo también tengo miedo
vivo en el vecindario
bebo la misma agua
sentimos las mismas travesuras de las lluvias y vientos
que vienen cuando la estatura del año es la de un mozalbete
colamos café juntos
muchas veces, anduvimos en velorios
manoseando la cintura picante del jengibre
gozamos del pandero y los tambores
también como vecinos, tenemos nuestros chismes
nuestras comunes devociones
igual ardor en el codo y la cintura….
Haití, ¿Qué pasa? te noto tembloroso,
recuerda que yo también estoy en líos
soy tu compinche y tu garante ante el enredo
que tienes con la tierra
finalmente, Tití, como te gusta que te nombre
me mortifica algo
y lo digo en secreto:
te acompañaré a mitigar la rabia de la tierra,
prométeme, ¡prométeme te pido!
que cuando vayamos al tribunal de espanto y pesadumbre
guardaremos en las mochilas las rencillas nuestras
de la infancia y el presente….
Tití, Tití, no llores, baja los brazos, advierte mi presencia,
cuenta debes darte ya, que estoy contigo…..
MIGUEL GARCIA ROMERO, enero 13 del 2010.
Santo Domingo, República Dominicana.

Diario Misionero del P. Joan Arbona (5)



Buenos Aires 22.01.2010
Buenas tardes desde Lugano. Estoy en Buenos Aires para renovar el DNI que me caducaba el 15.02.10. Un paso de gallinita cada dia: fotocopias y más fotocopias del pasaporte, del DNI argentino para extranjeros, soy misionero y emigrante... Certificado de domicilio, mucho tiempo y paciencia, colas interminable, así es nuestra querida Argentina...
Intentaré aprovechar esta tarde para escribir mi "Diario"...

Dios aprieta, pero no ahoga
Cuando uno se pone en las manos misericordiosas de Dios, cuando uno le dice un SÍ, consciente. Otro Sí y un paso de 1200 km... a Valcheta! ¿Cuál será el próximo? Él lo sabe, y yo seguiré intentando estar en sus manos de ABBA, confiadamente...

Dios tiene sus "tiempos" que no son los nuestros... Estuve en Valcheta del 16 de febrero hasta el 5 de abril 2009. Cuaresma hasta el Domingo de Ramos. Acompañando a un joven paraguayo, Rubén Fariña, en su formación y discernimiento vocacional y ayudando al P. Pedro Mª Aznárez en la pastoral. Una laica M.Ss.Cc me preguntó si no me quedaba. No respondí, no había llegado la maduración suficiente, no lo tenía decidido. Al poco tiempo mi silencio se convirtió en disponibilidad y el 15.12.09 se hizo realidad.

Noviembre y diciembre, meses muy llenos y de ir cerrando (despedidas y acciones de gracias).
El P. Josep Amengual llega para la Visita a la Delegación el 29 de octubre. Este mismo día tengo Consejo Pastoral de la Capilla de los Sagrados Corazones. El 30 viene a compartir la cena con la Comunidad el nuevo Obispo Auxiliar de Flores, Luis Fernández, muy familiar y asequible. Esta cena ya forma parte de la Visita del P. General. Después vendrán celebraciones, retiros, reuniones, charlas sobre el P. Fundador con motivo del Centenario de su Pascua, para terminar con la Asamblea. También lo acompaño a mi nueva Comunidad de Valcheta del 9 al 13 de Nov. Sin dejar los compromisos de Pastoral.
El Domingo 8 de noviembre celebramos las Primeras Comuniones en la Capilla SS.CC. El 15 tenemos el final de la Catequesis de Adultos con Bautismos, 1as Comuniones y Confirmaciones, después de un curso de crecimiento en la amistad y la fe. Seguimos con la Semana dedicada a la Familia en el Colegio Hnos. Amézola de Villa Madero, de donde he sido su Capellán, y la Semana de Fiestas Parroquiales. Lunes 16 charla a los padres del Colegio: " Crecimiento humano y cristiano". El martes en la Parroquia participo en el Rosario viviente. El lunes 23 empezamos la Asamblea. A las 13 celebro la Misa en el Colegio por ser el aniversario de la muerte de la Fundadora de las Religiosas hijas de Ntra. Sra. de Luján. El 26 despedimos al P. Josep Amengual después de haber pasado un mes con nosotros. El 27 última Eucaristía mensual animada por la Renovación Carismática. El sábado 28 participo de la visita a "tierra santa" de Bs.As. Hemos ido con un grupo de la Parroquia. Linda experiencia. El Domingo 29 dedicamos la comida y unas horas a reflexionar sobre el Cursillo de Evangelización, de las Diócesis de S. Justo y La Ferrere. Laicos comprometidos y que dedican tiempo e ilusión para que otros puedan tener un encuentro personal con el Señor. El Lunes 30 tenemos el final del Curso bíblico sobre las Cartas de Pablo a los Tesalonicenses y 1ª Corintios.
Y empiezo el último mes del año y del curso con una Misa de final de curso con los de 3º de polimodal, chicos/as de 16-18 años, que este curso se despiden del Cole. El día siguiente otra misa con los que terminan la primaria y pasan a la Secundaria 6º curso A y B, 11 y 12 años. El jueves 3 final Curso de S. Pablo en la Comunidad de la Capilla SS.CC. y también final con el Grupo de la Renovación Carismática Católica. El sábado 5 a las 15hs. tenemos Misa de la Renovación Carismática Católica. que preside el Cardenal Jorge Bergoglio s.j. y concelebramos algunos sacerdotes que acompañamos a los diferentes Grupos.
El domingo 6 de diciembre 1ªComunión familiar de Sofía, chica deficiente de 15 años. Que sólo entiende el "lenguage del amor"(comprensión y cariño de los papás). Martes 8 La Inmaculada en la Missa de la Capilla celebramos la 2ª Comunión.
Y empezamos despedidas grupales: Por la mañana del viernes 11 son los profesores del Colegio de una forma sencilla y familiar. Por la noche la Comunidad de la Capilla SS.CC. preparan cena a la Canasta en el Club de los Jubilados de la Calle Lisandro de la Torre, se reune un buen grupo de feligreses. Ambiente muy familiar, festivo, muy emotivo. Sábado por la mañana Bautismo de una Sra. de familia judía. A sus 53 años, después de varios años de búsqueda y reflexión ha pedido ser admitida en la Iglesia Catòlica. Una persona que le ha ayudado mucho ha sido la Sicóloga que ha elegido por madrina. Toda una experiencia... Por la tarde la mayoría de la Comunidad vamos al barrio 22 de Enero para participar de los Ministerios de Acólito y Lector de nuestros Hnos. Estudiantes Isaías de Rep. Dominicana y Denís del Camerún. Los confiere el Padre Obispo Damián, Auxiliar de la Diócesis de S. Justo. Con esta Celebración esta Comunidad ha querido Celebrar el Centenario de la Pascua del P. Fundador. De Lugano han participado unas 40 personas yo ya he ido en nombre de mi Comunidad de la Patagonia.
Y llegamos al Domingo 13. A las 11 hs. Misa de Acción de Gracias en la Capilla SS.CC. Almuerzo en la Casa de Mercedes que me ofrece la R.C.C. No faltaron los regalos, baile, fiesta y lágrimas... A las 19,30 Misa Concelebrada de Ac.de Gracias en Jesús Salvador. Al final un compartir en los bajos de la Parroquia, sencillo pero con auténtica gratitud..
Jubileo de los 65 años
14,12,1944. 5 de la mañana: Sóller (Mallorca), nace un niño hijo de Vicente y Margarita, que tres días más tarde recibirá el bautismo en la Parroquia de St. Bartomeu con el nombre de JOAN. Año 2009 en Lugano I y II Barrio sur de Buenos Aires, cumple sus 65 diciembres y es festejado por su Comunidad religiosa y Parroquial y con llamadas telefónicas de "Sa Roqueta".
Año nuevo, comunidad nueva
Martes 15, 20 hs. Estación de Liniers, un grupo de la R.C.C. y de la Comunidad me acompañan y me despiden hacia mi nueva Comunidad de Valcheta, Río Negro. Patagonia Argentina. Como han sido días de prisas y trasiegos antes de que presentaran la cena en el micro ya había echado un sueño, primera vez que me pasa. Las despedidas son emocionantes, pero un Misionero no tiene que tener casa asegurada, tiene que intentar ser nómada-peregrino al Estilo de Abraham.
Durante estos días mis oídos han escuchado lindas palabras de aprecio, valoración, agradecimiento y de queja "porqué te tienes que ir? si aquí hay..." Las mismas palabras que me decían en Mallorca el verano de 2005!!!
Qué planes tendrá el Sr. de la mies para el futuro... in manus tuas...
Y como resumen de esta etapa les anoto unas frases del personal docente del Colegio de Villa Madero: "¡Conocimos un Padre, tenemos un hermano y ganamos un AMIGO!" (11.12.09). Ojalá pueda hacer este procesos con muchas personas y familias en este tiempo de jubilacion laboral pero no vocacional. En la próxima comunicación daremos el salto de 1.200 kms a la Patagonia!
Para todos mi agradecimiento y mi abrazo de paz, ánimo, comprensión y solidaridad en este 2010.
Joan

sábado, 16 de enero de 2010

“¿Qué tenemos que ver tú y yo?” (Las bodas de Caná y el terremoto de Haití)


Acabamos de hacer la “Lectio Divina”, la lectura comunitaria del evangelio correspondiente al IIº Domingo del año.
Una lectura incómoda de “las bodas de Caná” (Jn 2, 1-12) porque las bodas en la Biblia son signo de la alianza de Dios con su pueblo (cfr. Os 2,21-22). Los escritos rabínicos del Antiguo Testamento dicen que la alianza se celebró en “el tercer día” del Sinaí: “Moisés salió por el campamento de Israel y fue despertándolos del sueño y diciéndoles: Despertad de vuestro sueño, que ya viene el novio buscando a la novia para llevarla a la alcoba y la está aguardando para darle la Ley. Moisés venía de padrino a sacar a la novia, como el que apadrina a un amigo ... Por su parte el novio salía a recibir a la novia y a entregarle la Ley, según está dicho: Oh Dios, cuando salías al frente de tu pueblo (Sal 68,8)” (Pirqê Rabbî Elî’ezer, XLI, 4).
Juan Bautista ya había proclamado a qué bodas de Nueva Alianza estamos llamados: “Ustedes son testigos de que yo dije: Yo no soy el Mesías, sino que me han enviado por delante de él. Quien se lleva a la novia es el novio. El amigo del novio que está escuchando se alegra de oír la voz del novio. Por eso mi gozo es perfecto” (Jn 3, 28-29).

Pero ¿cómo podemos predicar la alegría en un momento en que estamos sobrecogidos por el terremoto de Haití, uno de los países más pobres de la tierra? ¿Cómo anunciar el amor de Dios, cuando la gente pregunta: Podemos creer en un Dios que consiente entre 50.000 a 200.000 víctimas?

Es la pregunta que le hicieron al obispo de San Sebastián, pregunta que Munilla contestó a su manera y que ha escandalizado –sincera o farisaicamente- a todos los medios de comunicación social. No pienso que sea “una nota falsa” esta pregunta, como tampoco aquella del Cant Espiritual de Joan Maragall que tanto apenaba a D. Joan Mascaró Pasàrius: “Ja ho sé que sou, Senyor, prô on sou qui ho sap?” (Ya sé que existes, Señor, pero quién sabe dónde estarás!).

Buscando “dar razón de mi esperanza”, me fijo en la respuesta de Jesús a su madre cuando le dice que no tienen vino. Jesús le responde: ti emoi kai soi (2,3-4). Según mi recordado profesor de griego M. Zerwick, frase frecuente que generalmente expresa repulsa: ¿Qué hay entre tú y yo, mujer? ¿Qué relación tenemos tú y yo? Pero que ahora también podría significar: ¿Qué me cuentas a mí de esta gente? ¡No es nuestro problema!

San Ireneo nos da el tono adecuado de interpretación: “Aún no ha llegado mi hora”. “Cuando María quería apresurar el maravilloso signo del vino y deseaba participar antes de tiempo de la copa del abreviado, el Señor rechazó su prisa intempestiva diciéndole: ¿Qué para mí y para ti, mujer? Aún no ha llegado mi hora” (Jn 2,4), porque debía esperar la hora preconocida del Padre”.

La “hora” concentra los dos aspectos: muerte y resurrección. Antes tiene que pasar por la cruz: “Mi alma ahora está turbada. ¿Y qué diré: Padre, líbrame de esta hora? ¡Si para esto he llegado a esta hora!” (Jn 12,27). Igualmente los discípulos debemos pasar primero por una “hora” de dolor, como la mujer cuando le llega la hora de parto, después no se acuerda de la angustia por la alegría que siente (Jn 16,21).

A la pregunta de cómo podemos seguir creyendo en un Dios que consiente la muerte de tantos inocentes, yo no veo otra respuesta que la de Jon Sobrino: Porque él se ha puesto primero de parte de las víctimas. Porque primero se ha hecho víctima inocente en su Hijo que moría en la cruz. Porque esperamos que un día hará justicia a las víctimas de todos los poderosos que provocan este desastre.
Pienso en mis amigos haitianos Jean-Clo, Fala, Madeleine y tantos otros, mientras rezamos la hora de sexta, cuando Jesús gritaba en el gólgota: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?” Los versículos del Salmo 34 “El Señor está cerca de los que sufren / y salva a los que están abatidos… / Cuida de todos sus huesos, / ni uno solo se romperá”.
No es voluntad de Dios que mueran tantos pobres. Es voluntad de los poderosos que han apoyado tantos años de dictadura en Haití, que han sofocado cualquier intento de alzar la cabeza, que lo han abandonado a su suerte porque no cuenta en la hora de la globalización.

“Ya no te llamarán la Abandonada ni a tu tierra la Devastada, a ti te llamarán mi Preferida y a tu tierra la Desposada”, dice Is 62,4 en la 1ª lectura de hoy. Es en este Dios de las víctimas que creemos. Más presente hoy en las víctimas del terremoto, que se arrastran como zombis entre las ruinas, que en los que celebramos en nuestros templos, perfumados de colonia e incienso. Desde allí el Abbá nos llama a la solidaridad y a la fraternidad para que el luto pueda convertirse -pronto- en fiesta.

viernes, 8 de enero de 2010

Consolad, consolad a mi pueblo (Domingo del Bautismo del Señor)



1. “Consolad, consolad a mi pueblo, dice vuestro Dios” (Is 40,1). Me gusta que los domingos del año empiecen con este mandato divino. Porque se agolpan muchos motivos de desconsuelo en nuestro ámbito personal, familiar y comunitario. Igual que el comején carcome el corazón de la madera o el insomnio que no nos deja dormir plácidamente. “Hablad al corazón de Jerusalén” (v.2), buscadle la vuelta a cada uno, así como se enamora a una mujer, para que le llegue personalmente. Deja que Él mismo te lleve al desierto donde pueda hablarte al corazón (Os 2,16). Porque ¿no es arena lo que pisamos, no es en bancos movedizos de arena donde se hunden nuestros pies? Los salmos de hoy (28 y 103) anuncian la voz que llega en la tempestad, mientras en Lluc cae la lluvia intermitentemente, “las nubes sirven de carroza” y ocultan las cumbres que nos circundan como un abrazo que infunde seguridad. Silban los vientos “que te sirven de mensajeros”, han pronosticado para hoy una caída de unos 10º de la temperatura y desde temprano nos visita el aguanieve. Sí, tal vez sea higiénico que los vientos barran nuestras hojas muertas. Abríganos Tú, con tu manto de nieve purificador. “Tú que andas sobre la nieve”, como reza Leopoldo Panero... “Ahora que alzo mi corazón, y lo alzo / vuelto hacia Ti mi amor, / y lo alzo / como arrancando todas mis raíces... / Ahora que siento mi memoria como un espejo roto... / Ahora que se me pone en pie, / sin oírlo, / el corazón”.

“Dice una voz: Grita. Respondo: ¿Qué debo gritar?” La experiencia de caducidad de la vida en nuestro propio calendario. “Toda carne es hierba y su belleza como flor campestre: se agosta la hierba, se marchita la flor”. Hace falta renovar tu fe en que “la palabra de nuestro Dios se cumple siempre”. “Súbete a un monte elevado, heraldo de Sión, alza fuerte la voz, álzala, no temas, di: Aquí está vuestro Dios... como un pastor que apacienta el rebaño”. Creemos porque tenemos necesidad de un poco de consuelo.

2. Dice la carta apostólica: “Porque se ha manifestado el amor misericordioso (la gracia) de Dios que salva a todos los hombres... También nosotros éramos antes necios, desobedientes, extraviados, esclavos de pasiones y placeres diversos, maliciosos, envidiosos, odiosos y odiándonos mutuamente. Pero cuando se manifestó la bondad de nuestro Dios y Salvador y su amor al hombre, no por méritos que hubiéramos adquirido, sino por su sola misericordia, nos salvó con el baño del nuevo nacimiento y la renovación por el Espíritu Santo… de modo que fuéramos en esperanza herederos de la vida eterna” (Tito 2-3). ¿Quién puede negar este lado necio y odioso de cada uno de nosotros, que habiendo ya empezado un año nuevo, no se deja renovar? ¿Puede haber mejor contrato que el firmado, no sobre lo que nosotros aportamos, sino sobre la benevolencia de la parte principal? ¿Dudaremos en llamarlo bondad, ternura, cariño paterno-materno, gracia y misericordia? ¿Somos conscientes de que es un don ya recibido por el bautismo, que nos ha hecho criaturas nuevas, nos ha regalado “la Consolación del Espíritu” y nos ha salvado en esperanza?

3. Hoy es la fiesta (permanente) del bautismo de Jesús y, en cierta manera también, del nuestro. “En un bautismo general (hermano entre los que estaban en expectación, pastor herido entre los que exponían sus llagas al sol), Jesús también se bautizó. Y mientras oraba, se abrió el cielo, bajó el Espíritu Santo sobre él en forma de paloma (seguro que no se equivocó la paloma, ¿será la paloma del nuevo comienzo después que se ha corrompido toda carne?, ¿serán las palomas del Cantar cuando llega el tiempo de los amores?), y vino una voz del cielo: Tú eres mi Hijo, el amado, el predilecto” (Lc 3, 21-22). Una teofanía elocuente hasta para el desconsuelo de que hablábamos al principio.

“El Evangelio de Lucas (que corresponde a nuestro ciclo litúrgico) puede ser leído en clave de consuelo. Basta con transcribir alegría por consuelo. Así nos encontramos con el consuelo de los pastores ante la Noticia del Nacimiento de Jesús; el consuelo de la mujer por la dracma perdida y encontrada; el consuelo del que va por el campo y encuentra un tesoro; el consuelo del Hijo perdido y reencontrado entre las manos de Dios Padre-Madre (las manos del cuadro de Rembrandt); el consuelo de la viuda de Naím…; el consuelo en forma de bálsamo de aceite el Samaritano al herido en el camino; el consuelo de la oveja perdida y encontrada; el Benedictus, como canto de la consolación de Israel; el Magnificat, como canto de consolación de la Iglesia… No resulta difícil encontrar en todo ello el perfil de la nueva comunidad, heredera del Antiguo Israel y abierta a todos los pueblos de la tierra, portando el mensaje de la Consolación hecha acontecimiento en Jesús de Nazaret” (J. L. Achótegui).

Que también “nosotros podamos consolar a los que pasan cualquier tribulación con el mismo consuelo que recibimos de Dios” (2 Cor 1,4).