miércoles, 1 de agosto de 2018

Cantos al P. Joaquim Rosselló, nuestro fundador (1)





Gloria a ti, nuestro Padre amoroso 

Con motivo de que en agosto ocurre el aniversario de nuestra fundación, publicaremos varios de los cantos dedicados al P. Joaquim Rosselló. El primero del repertorio que recuerdo lo conocí en el seminario, a mitad de los años 50, cuando a nadie se le ocurría la posibilidad de un Concilio. El tema del fundador y su causa de beatificación era algo que se tocaba en contadas ocasiones, y estaba prácticamente reservado a los maestros, consejeros y al Procurador general, que era el P. Gabriel Seguí Vidal. Nos leían en público las Notas referentes a la Congregación del P. Joaquim, Un gran misionero del P. A. Thomàs y sobre todo mucho Espíritu del Fundador escrito por el obispo de Vic. Una década más tarde, el P. José Nicolau escribiría una nueva biografía, con un estilo literario más cuidado, que acabaría llamándose Un hombre que creyó en el amor.



El Estudiante Guillem Matheu, de Caimari, había adaptado un antiguo himno a Cristo Rey de tono triunfalista, que hablaba de conquista espiritual (“hacer, si posible fuere, que todo el mundo se consagre a los SS. Corazones”), de pureza (“modelos de sacerdotes”) y amor (“en esto conocerán que son mis discípulos”).

Todas las noches, antes de acostarnos, pasábamos a besar el busto hierático del Fundador, con su modesta esclavina y su clásico bonete de tres puntas, que presidía el Escolasticado. Cierto estudiante teólogo, a punto de ordenarse, nos contaba con su verbo fogoso que para superar sus crisis vocacionales él había dormido con el busto del Fundador entre las sábanas. Nosotros no nos hubiéramos atrevido, lo respetábamos demasiado. En las grandes ocasiones lo cantábamos a todo fuelle, y pletóricos de entusiasmo. 


Copio la letra para que se hagan cargo y una versión en facebook que grabamos la semana pasada en las montañas de Palo Alto, en la magnífica cordillera de Santiago. No quedó demasiado afinado, yo soy negado para tono y ritmo, pero el P. Miquel Melià fue un bajo de renombre en el coro del Santuario de Lluc. Las fotografías se refieren a diferentes muestras de la conquista espiritual que se respiraba entonces.



Himno de G. Matheu:


Gloria a ti, nuestro Padre amoroso,

oh Joaquín, ideal Fundador,
viviremos tu anhelo ardoroso
de conquista, pureza y amor.

Es tu espíritu noble y fecundo
luminoso y levítico ideal,
en tu obra hallará todo el mundo
competente socorro a su mal.

Gloria a ti, nuestro Padre amoroso,
oh Joaquín, ideal Fundador,
viviremos tu anhelo ardoroso
de conquista, pureza y amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario